Existen varios estudios que muestran que la gente activa, que no ejercita formalmente, muchas veces gasta más calorías semanales, que personas sedentarias que ejercita dos a tres veces por semana, 1 hora por sesión y luego no se mueve más. Por eso es muy importante “elegir movernos” en el día a día, además de incluir algún tipo de ejercicio en nuestras rutina, que para partir puede ser incluso caminar más.
Cuando decidimos empezar a ejercitar, la pregunta es ¿Y qué hago? ¿Ejercicios aeróbicos, Yoga, Pilates, máquinas en el gimnasio, kick boxing, zumba? Nos enfrentamos a una variada oferta, sobre todo ahora que se acerca el verano, donde los gimnasios ofrecen muchas promociones para la estación.
Existen formas más eficientes de ejercitar que otras, dependiendo de nuestras metas. Es distinto por ejemplo, el querer perder grasa, que el ejercitar para tener brazos “más grandes”, o ejercitar para participar en una maratón.
Si el objetivo es perder grasa, al elegir, deberíamos fijarnos en tres aspectos fundamentales: su potencial para el desarrollo muscular, la quema de grasa durante el ejercicio, y el gasto calórico post ejercicio (EPOC). A la hora de quemar grasa, hay actividades que son “más rentables” que otras, es decir, donde quemas más grasa por minuto o por hora; y mejor aún algunas en las que sigues quemando grasa después de realizado el ejercicio.
Tanto en la consulta como por mail, una de las preguntas estrella es
¿cual es el mejor ejercicio para adelgazar?
La respuesta: una mezcla de ejercicio de fuerza y ejercicio aeróbico de intervalos. La proporción de uno y otro dependerá de tú metabolismo, de tu biotipo, tus metas, y de tu punto de partida de salud y peso.
Tantas veces se escucha y se lee que menos de 45 min o una hora de ejercicio no son suficientes para ver resultados. No es cierto, mejor dicho sólo parcialmente cierto. Eso puede pasar en el ejercicio aeróbico tradicional, pero existen muchas otras formas de ejercitar con protocolos que requieren menos tiempo.
La mayoría de las personas que quieren reducir su grasa corporal, lo primero que hacen es recurrir al ejercicio aeróbico como salir a correr o a trotar, sin saber que lo más eficiente es incorporar también ejercicio de fuerza para poder desarrollar músculo y cambiar grasa por peso magro. Ese cambio les entregará un gran beneficio, ya que mientras más músculo tienen, más calorías queman en reposo (se acelera el metabolismo). Por cada ½ k de músculo que ganemos, quemamos 50 calorías extras al día. El músculo es un tejido activo que acelera el metabolismo, ya aumenta el gasto energético haciendo que nuestro cuerpo gaste más calorías y queme grasa mientras conversamos, trabajamos o dormimos.
Si alguna de las mujeres que está leyendo este artículo está pensando que así transformará su cuerpo en uno de físico culturista, ¡está muy equivocada! Por nuestras hormonas, eso es muy difícil para una mujer!! Para eso necesitarías varias horas al día de pesas, y una dieta especialmente diseñada para eso. Lo que si vas a ver al incorporar ejercicios de fuerza, es un cuerpo esbelto y tonificado y con bonitas formas.
El ejercicio aeróbico tradicional es bueno, pero tiende a usar como combustible principal el carbohidrato antes que la grasa, y demanda mucho más tiempo, y muchas veces si la alimentación que lo acompaña no es la adecuada, podemos gastar músculo: muy mal negocio!!. Los ejercicios aeróbicos de intervalos, combinados con ejercicios de fuerza, actúan quemando un mayor porcentaje de grasa, y haciendo que el cuerpo produzca enzimas y hormonas que intervienen en el metabolismo de las grasas y la producción de músculo, en un tiempo mucho menor.
Así que ya sabes, a moverse pero con sabiduría!! Aprovecha y optimiza tu tiempo haciendo ejercicios aeróbicos de intervalos y ejercicios de fuerza para reducir la fea y dañina grasa, mejorando tu salud y tu apariencia!
Ayudarte a diseñar un programa de ejercicios y comidas específico para tus necesidades es una de cosas que te ofrezco en mi Coaching Nutricional.